...y nunca mejor dicho lo de "hacer"!!
Darío me ayudó a coser (le daba al pedal), a rellenar y a pegar los accesorios del Señor Martillo.
Lo encontramos ojeando uno de los primeros libros que compré cuando empecé a coser: Softies . Al llegar a su página Darío tuvo un momentazo "lo vi y me enamoré"
Así que trabajamos en equipo para traerlo a nuestra casa...
Hasta le hicimos un hogar-dulce hogar!! (un jueves de huelga y lloviendo da para mucho!)
Valdrá el Señor Martillo para la KCW? Supongo que no!
Pues es lo que hay!